Mi casting PORNO (real). Parte 3 y final.

Ya dentro del taxi camino de L'Hospitallet me tomo una pastilla de Viagra de 100 mg. Tener un familiar que trabaja en una farmacéutica tiene estas ventajas de contar con suministro asegurado de medicamentos. Se llama Juan. Un pariente por parte de mi madre que ha visitado varias veces nuestra casa en verano y me ha visto en la piscina bañándome desnudo (cosa que hacemos mi hermana y yo desde que éramos niños). Alucinado por el tamaño de mi polla me preguntó si tenía algún problema para tener sexo o para que se me pusiese dura. Yo le respondí la verdad: NO. No obstante el me dijo que me pasaría unas pastillas de vez en cuando por si me servían de ayuda en algún momento.

Un buen momento era ESTE. Con 18 años recién cumplidos y aún bajo los efectos de esos niveles de testosterona gracías a los cuales tenía casi 24 centímetros de polla, no necesitaba para nada tomar Viagra. Las viagra las reservaba para casos muy concretos: cuando organizábamos unas de esas fiestas de follar que las llamaba yo con unos cuantos amigos y cosas así donde tenía claro que iba a follar con más de uno.

Las veces que había probado la viagra notaba que aún después de correrme recuperaba casi al instante la erección y podía seguir follando sin problemas.

No tenía ni idea de lo que me iba a encontrar en el FICEB al hacer el casting. Me imaginaba cámaras, focos, mucha gente alrededor... Así que prefería asegurarme de que mi polla iba a responder sin problemas.

Llegamos a La Farga y entro. La luz matinal del sol de octubre ilumina el interior de la inmensa nave a traves de los enormes ventanales. Los focos del techo están apagados. Los stands algunos cerrados otros con gente pululando de aquí para alla. Ruido de botellas al descargar los operarios cajas de bebida en el bar. Trajinar de carretas cargadas con cajas de cartón. Gente del equipo de limpieza barriendo las alfombras.

Camino hacia el Stand de Evil Angel mientras busco entre los presentes al tipo del pitillo de ayer. En ese momento oigo una voz proviniente de un lado del stand:

"RAUL FINANDIS?" pregunta.

Es un tipo rubio con el pelo muy corto y muy rizado. Piel morena. Acento extranjero. Vestido con pantalón de chandal y una camisa con el logotipo del FICEB.

"Si. Yo mismo" respondo.

"Great, estaba esperando por tí. En quince minutos salimos para el Hotel. Tómate algo en la cafetería mientras esperas" me dice señalando con la mano la cafetería al fondo del pasillo.

Camino a pedir un café mientras evaluo la situación. O sea que el casting lo vamos a hacer en una habitación de hotel. Llego a la barra y pido un cafe. A mi lado un chico negro bastante alto, muy joven también, bebe de un vaso.

Al poco rato llega el tipo rubio que me había hablado antes.

"Hola, soy Dieter. Venid conmigo. Tengo el coche fuera. Salimos ya"

Ha dicho venid. Miro al chico negro y veo que también está mirando a Dieter. O sea que no voy a ser el único para el casting esa mañana.

Mientras vamos dentro de la furgoneta Mercedes de color negro me pregunto qué tipo de casting va a ser. ¿Acaso será follando yo y el chico negro a la vez con una chica, o con dos?.

Dieter conduce con una soltura envidiable. Está claro que conoce bien Barcelona. Habla por su teléfono movil en un lenguaje que yo diría que es aleman. De vez en cuando me mira sin dejar el teléfono y asiente con la cabeza mientras sigue conduciendo.

"Ya estamos llegando. Cinco minutos" nos dice. Yo voy sentado en el asiento del copiloto y el chico negro va en el asiento de atrás.

Llagamos a la zona del puerto olímpico de Barcelona. Nos acercamos al inmenso edificio del hotel Arts y la furgoneta se introduce directamente en el parking subterráneo del hotel.

De ahí al ascensor que en una planta indeterminada nos deja a las puertas de la habitación. Dieter se saca del bolsillo la tarjeta electrónica de la llave y entramos. Lo primero que hay es un pequeño recibidor con un mueble bar y unas butacas iluminado ténuamente por unas lámparas de diseño. Hay bebidas en el mueble bar, televisión. Ambiente muy acogedor y comfortable. Dieter nos dice que esperemos mientras abre otra puerta y desaparece.

Al cabo de un minuto Dieter se asoma por esa puerta y me dice: "Raul, primero tú".

Yo entro por esa puerta y accedo a un dormitorio profusamente iluminado por los inmensos ventanales. Una gran cama de matrimonio cuadrada con sábanas granate preside la habitación. Frente a la cama una cámara profesional de video sobre un trípode. Tres o cuatro ordenadores portátiles de Apple distribuidos sobre pequeñas mesas a lo largo de la habitación. En uno de ellos, al fondo junto al ventanal una chica de melena negra ondulada chatea sentada de espaldas a mí. Junto a Dieter una mujer que me dobla en edad porque calculo que tendrá unos 40 años. Es rubia. Lleva una falda corta de ejecutiva y camisa blanca con una identificación del FICEB en la solapa. Pelo rubio recogido en un gran moño. Muy maquillada. Piel blanca. Pendientes enormes penden de sus orejas.

"This is Mary" me la presenta Dieter.

Nos damos la mano. La tal Mary sonrie y me dice:

"Encantada. Vamos un poco tarde así que si te parece empezamos ya". Habla en un perfecto castellano. Yo creo que es española.

Me indican que me diriga al cuarto de baño para que me duche. Me dirijo allí mientras pienso que con las prisas no me han presentado a la chica que chatea en el portatil al fondo de la habitación y que me imagino que es la que voy a follarme.

En el cuarto de baño unas cuantas toallas con el logotipo del hotel perfectamente apiladas y envueltas en lazos de papel. Me ducho y mientras me seco observo que en el lavabo hay un par de pequeños neceseres con el logotipo de la productora Evil Angel. Abro uno de ellos y veo que tienen un blister con un par de pastillas de viagra, condones y gel lubricante.

Lleno de agua un vaso y me trago otra pastilla de Viagra. Ya llevo dos viagras dentro de mi cuerpo. Saco del bolsillo de mis pantalones un blister de condones XL de los que yo utilizo. Los que hay en el neceser parecen ser condones normales. Pero yo ya se muy bien lo difícil que es colocar unos condones normales en mi pollón, sobre todo por la cuestión del grosor. Así que como no quiero sorpresas he decidido traer los de la marca que uso habitualmente.

Así que con los condones en la mano y la toalla humeda al hombro salgo del cuarto de baño. Mi pollón cuelga largo y especialmente grueso por efecto del Viagra.

"Oh my God!" exclama Dieter situado tras la cámara de video mirando mi verga balancéandose entre mis piernas. A su lado y de pie, Mary sonrie también con sus ojos clavados en mi polla.

"IT'S TOO BIG FOR ME!!" exclama a voz en grito entre risas la chica desconocida que está de rodillas sobre la cama. Está totalmente desnuda. Su melena negra y ondulada se desparrama sobre sus hombros y sus tetas redondas y abultadas (seguramente siliconadas).

Risas por toda la habitación.

Me agarro la polla por detrás de los huevos. Siendo el centro de atención se me ha puesto totalmente dura. Empuñándola desde detrás de los huevos me doy unos sonoros pollazos en la palma de mi otra mano abierta mientras siguen las exclamaciones de admiración de los presentes ante el tamaño de mi rabo.

En el porno y en internet se exagera mucho con el tamaño de las pollas: hablan de 25 de 30 de 35 centímetros y más. No parece tener fín.

Pero en la vida real, os aseguro que tener delante una polla de casi 24 centímetros (medida por la parte de arriba) y bien gruesa no deja a nadie indiferente. Esos tres de la habitación del hotel experimentaban lo mismo que han sentido todas las decenas y decenas de personas de ambos sexos que me han visto la polla a lo largo de mi vida: admiración.

Mary se acerca tímidamente hacia mí y agarra mi verga. Primero con una mano, luego con la otra. Tiene manos rechonchas (porque es una mujer rellenita) pero son manos pequeñas de mujer de sobre 1.60 de estatura calculo yo. Ve que hay espacio para una tercera mano todavía. Sin decir nada pero sonriendo y con la boca abierta mira hacia la cámara frente a nosotros y abre como platos sus ojos azules en una expresión de estar alucinando. Dieter se rie a carcajadas.

Giro la cabeza y veo a la chica ya a cuatro patas sobre las sábanas con el culo en pompa y moviéndolo en círculos. Comienza la acción.

Me subo a la cama de rodillas y me inclino detrás del culo de esa desconocida y le beso en esas nalgas casi tan bronceadas como mi propia piel tras este caluroso verano que he pasado broncéandome en la playa nudista de Cabopino.

Apenas me da tiempo a darle un par de besos en ese culito respingón cuando la chica se pone de pie y me indica que me siente en la cama.

Yo obedezco y me siento. Observo que Dieter inclinado sobre el visor de la cámara nos contempla. Las cortinas y persianas de los ventanales están bajadas y la habitación está iluminada por una enorme lámpara profersional sobre un soporte de pie en una de las esquinas. El aire acondicionado no mitiga la sensación de calor en mi piel proveniente de ese enorme foco profesional que está iluminando el rodaje.

Mary se mueve alrededor de la cama armada con una cámara reflex con la que va tomando fotos de vez en cuando. Nadie habla. Solo se escucha la ténue musica de jazz instrumental que suena de fondo en el hilo musical del hotel.

Sentado al borde de la cama con mis piernas bien separadas, mi pollón de casi 24 centímetros y grueso como nunca lo había visto (el efecto de tanta viagra) se balancea a merced de lo que esa chica menuda, morena y con tetas de silicona quiera hacer con él.

La chica menuda (debía de medir en torno a 1.60m) se pone de rodillas sobre la alfombra y mirando hacia el objetivo de la cámara frente a la cama, empieza a lamer de lado mi polla, recorriéndola con sus labios húmedos de abajo a arriba varias veces mientras su mano me la agarra por la base presionando sobre mis huevos.

Luego me suelta la polla y sus labios rodean mi glande metiéndoselo poco a poco dentro de la boca. Mi pollón palpita de deseo con la punta dentro de la boca de la chica que vuelve a agarrarme la verga con su mano por la mitad. Siento su mano caliente y mi polla fria. Está superinchada como pocas veces la he visto por el efecto de las dos viagras que llevo en mi organismo.

Giro la cabeza y miro hacia la cámara. Mary, de pie al lado de Dieter me indica con las manos que siga adelante: "vamos vamos".

Así que decido pasar a la acción. Agarrando mi polla por la base, desde detrás de mis huevos, empiezo a darle unos sonoros pollazos en las mejillas de la chica, que los recibe con la boca abierta y los ojos cerrados: "plas, plas, plas"...

La agarro del pelo por esa melena ondulada negra y le sujeto la cabeza mientras empujo mis casi 24 centrimetros de polla gorda dentro de su boquita abierta y ella empieza a tragar. Me quedo quieto y solo empujo sujetándole la cabeza para que no la mueva y trage.

Poco a poco más y más centímetros de mi verga se van introduciendo dentro de su boca. Cuando llego al fondo (un poco más de la mitad de mi rabo dentro de su boca) empiezo a empujar su cabeza contra mi rabo. Ella tiene la boca abierta a tope, me mira con los ojos bien abiertos. Respira con dificultad por la nariz con sus manos apoyadas en mis muslos. Así, los dos quietos mientras mi pollón le llega a ella hasta la garganta, Mary se aproxima y nos toma fotos desde todos los ángulos con su cámara réflex.

De un golpe le saco mi pollón de la boca y ella recupera aire con un sonoro "aaaahhhhhhh"

Pero yo no doy tregua. la agarro fuerte por el cuello y empiezo a darle unos pollazos brutales en esas dos grandes tetas de silicona, unas tetas anormalmente grandes en su cuerpo delgado y menudo. PLAS, PLAS, PLAS... el ruido de los sonoros impactos de mis 23 centímetros de gruesa hombria golpeando contra esas tetas firmes, redondas y duras resuena en la habitación. La chica gime, quejándose, con mueca de dolor. Mi polla vuelve a introducirse brutalmente en su boca y con mi mano muevo su cabeza adelante y atrás obligándola a tragar y tragar...

Me levanto de la cama e inclinado con mis piernas flexionadas empiezo a mover mi culo adelante y atrás bombeando mi pollón en la boca de esa chica en un auténtico follaboca duro, brutal y sin contemplaciones. Actuo, que para eso estoy siendo grabado por una camara, con movimientos fuertes y contundentes. Ciertamente exagerados.

Mary se mueve alrededor nuestro inmortalizando con su cámara a esa chica menudita engullendo esos casi 24 centímetros de gruesa verga empapada en saliva. Traga y traga. Empujo su cabeza cada vez con más fuerza contra mi polla. Escucho a Dieter emitir un silbido de admiración detrás del visor de la cámara que nos apunta.

De nuevo saco de un tirón mi verga de esa boca totalmente abierta, forzada y derramando saliva por la comusira de sus labios y me arrojo de golpe sobre la cama, quedando tirado boca arriba a todo lo largo de mi 1.90m de estatura. Mi pollón queda reposando sobre mi barriga, empapado de la saliva de la chica y pasándome todo el capullo por encima del ombligo.

Mary me hace una seña con la mano para que no me mueva y se sube a la cama, con las piernas separadas sobre mí, mientras dirigiendo el objetivo de su cámara hacia mi pene me toma un par de fotos. Yo se muy bien lo que está fotografiando: mi pollón pasandome por encima de mi ombligo (y eso que soy muy alto). Es en lo que todas y todos se fijan siempre cuando yazco desnudo a su lado sobre la cama.

Mary se baja de la cama y la chica menuda ocupa su lugar poniéndose a horcajadas con sus piernas abiertas sobre mi pollón que sigue apoyado en mi abdomen. Se inclina hacia adelante acercándome esas dos grandes tetas de silicona a mi boca mientras me agarra el rabo con la mano y lo apunta a la entrada de su coño.

Pero yo quiero hacer más cosas antes de penetrarla así que la agarro por las caderas y acerco su coño a mi cara. Recostando mi cabeza sobre la almohada la fuerzo a que siente su culo sobre mi cara mientras mis manos agarran con fuerza, separándolas, sus nalgas redonditas y suaves.

Huele a jabon. Un intenso olor a jabon y a limpio. Ese coñito está totalmente limpio, recién lavado. Tanto que el olor a jabon se hace omnipresente enmascarando el olor a hembra y a coño. Mi lengua martillea su clítoris abultado. Tiene el coño totalmente depilado mostrando esa rajita totalmente abierta, dilatada y visible: la sonrisa vertical, le llaman.

Tanto olor a jabon me está saturando la nariz. Me recuerda a alguna ocasión que folle con una prostituta. Era la misma sensación: todo limpieza y jabón. Asi que le hago una señal a la chica para que se de la vuelta y se queda mirando hacia la cámara con su culo sentado totalmente sobre mi cara. Mi nariz presiona contra el hueso pélvico de la chica, justo en donde se inicia la raja de su culo. Mi lengua traza círculos alrededor de su ano. Con el olor de la piel de ese culo penetrando mi nariz que intenta introducir aire en mis pulmones, mi lengua presiona y presiona contra el ano de la chica hasta que logro introducir la punta dentro. Ano también totalmente higienizado. Mi lengua no percibe sabor alguno salvo el calor de la punta de mi lengua dentro de ese culo. Vuelvo a dirigir mi lengua a su coñito y de nuevo al culo y de nuevo del culo al coñito así varias veces.

Mientras la chica se ha inclinado hacia adelante y me come el pollón con envidiable entrega para que se vea bien en el video grabado. Con dificultad porque no puedo ver nada con mi cara enterrada bajo el hermoso culo de la muchacha, libero mi brazo derecho de debajo de su pierna y lo extiendo hacia adelante palpando sobre su espalda hasta llegar a su cabeza. La agarro del pelo y empiezo a empujar su cabeza contra los 23 centímetros de mi pollón duro como una piedra y extra grueso por efecto de las dos viagras y flexionando mis piernas, me apoyo en ellas para bombear brutalmente mi verga en esa boquita como si estuviese follándome un coño.

Mientras hago esto con mi boca succiono los labios mayores y salidos de ese coñito metiéndome de paso su clítoris cada vez más abultado y palpitante dentro de la boca. Ahí lo aprisiono con mis labios y comienzo a succionar y succionar con fuerza mientras mi lengua lo tortura sin descanso. Los gemidos emitidos por la nariz de la chica con su boca llena de mi pollón son cada vez más y más sonoros. Yo agarro con fuerza sus nalgas totalmente separadas mientras empujo su culo con fuerza aplastando mi cara. Me duele ya la boca de tanto succionar y lamer aceleradamente ese clítoris abultado. Las nalgas suaves de la chica se ponen en tensión. Su culo suave se transforma en músculo tenso y duro mientras ella sacándose de golpe mi pollón de su boquita empieza a gemir corriéndose entre estertores de placer. Mueve el culo con violencia adelante y atrás lastimándome en la nariz. Se esta corriendo como una campeona dentro de mi boca.

En uno de los movimientos separa su culo de mi cara y puedo ver por el rabillo del ojo como Mary está inclinada al lado de la cama tomándonos más fotos. El culo de la chica vuelve a sentarse sobre mi cara y me entierra de nuevo bajo el. Pasados unos instantes la chica se incorpora. Mi pollón sigue reposando sobre mi abdomen palpitando de deseo y a punto de eyacular.

"Condon" dice la chica.

Joder, es verdas. Si todavía no me había puesto el condón y eso que pense que ya se la iba a meter por el coño antes.

Así que aprisa extiendo la mano hacia la mesita de noche y cojo el condón XXL que me traje de casa. Con un rápido movimiento de mano me lo coloco a toda prisa porque siento que de un momento a otro me voy a correr.

La chica vuelva a ponerse a horcajadas sobre mí mientras yo mantengo los 23 centimetros de verga gruesa levantados desafiantes. Su coño va bajando lentamente sobre mi pollón hasta introducirse dentro de ese coño. Un coño holgado, lubricado con lubricante y con los restos de mi saliva. Entra sin dificultad.

La chica comienza a mover el culo arriba y abajo, separándose de mí porque mis 23 centímetros permiten penetrar desde cierta distancia. Ella aprovecha la longitud de mi polla y mueve con maestria ese culito respingon arriba y abajo, arriba y abajo. Un espectáculo que la cámara digital de video operada por Dieter recoge con sumo detalle.

Vuelvo a flexionar mis piernas. Agarro con fuerza sus nalgas separándolas para que la cámara capte bien mi pollón bombeando sin piedad ese coñito mientras ella sigue martirizándome con la deliciosa danza de sus culito moviéndose frenético arriba y abajo, arriba y abajo.

El estremecimiento de mi orgasmo estalla desde la base de mi columna cervical y se extiende por todo mi cuerpo mientras siento como mi esperma atraviesa atropelladamente los 23 centímetros de mi verga y una presión del abundante semen que se va acumulando alrededor rodea mi capullo.

"ME CORRO, JODER, ME CORRO AHHHHH AHHHHH AHHHHH" bramo como un animal mientras disparo chorros de leche caliente dentro del coño de esa chica. De tan caliente que estaba la penetración no llego ni a los 4 minutos. Suficiente, en todo caso para que la cámara registrase mi desempeño bombeando.

Quedo tendido en la cama donde yacemos yo y la chica a mi lado. Ella rie y se lleva la mano a la cara para secarse el sudor que la cubre. Yo también tengo el cuerpo empapado en sudor. El aire acondicionado de la habitación no puede mitigar el calor constante de ese foco profesional que ilumina la cama sobre la que yacemos ambos totalmente desnudos.

La chica se incorpora y camina hacia el cuarto de baño. Mary pulsa un boton que activa las persianas que van elevándose lentamente mientras la luz exterior vuelve a penetrar en el dormitorio. Mientras Dieter se sienta ante un ordenador portatil de Apple yo me quito el condón de mi polla todavía totalmente dura por efecto de los dos viagras.

Aprovecho eso y sin pensármelo me deslizo hacia abajo en la cama y elevo mis piernas hacia atrás introduciéndome de un golpe mis pollón en mi boca. Con los ojos cerrados oigo la voz de Mary exclamar "Joder!!"

Saco mi verga de mi boca y digo en voz alta "también soy gay" para volver a metérmela dentro a continuación.

"He's also gay, Dieter" exclama entre risas Mary.

Unos segundos mas mamando mi pollón y me vuelvo a tumbar extendido sobre la cama. Dieter se ha levantado del ordenador y está de pie al lado de la cama mirándome fijamente con una sonrisa.

"Gay also?" pregunta Dieter.

Yo sin dudarlo me siento al borde de la cama, piernas separadas, pollón colgando desafiante y firme entre ellas y bajo de un tiron a la vez los pantalones deportivos y calzoncillos de Dieter.

Queda a mi vista una de las pollas más arrugadas que he visto en mi vida. Arrugada y con un montón de vello rubio y unos huevos grandes y peludos. Me meto esa polla flácida en mi boca y comienzo a succionarla notando como poco a poco se va hinchando y poniendo más y más dura.

Las manos de Dieter acarician mi cabeza y yo acaricio su culo, sus nalgas firmes. Muevo mi cabeza adelante y atrás tragando hasta el fondo esa polla ya totalmente dura. La saco de mi boca y la contemplo. Es de tamaño medio, ni grande ni pequeña, es gruesa. Me ocupo ahora de sus huevos. Los introduzco dentro de mi boca y empiezo a succionarlos y lamerlos con mi lengua, dando ligeros tironcitos como se que nos gusta que nos hagan a los hombres mientras la punta de mi dedo se introduce en el ano de Dieter.

Dieter, con los ojos cerrados y agarrándome con fuerza la cabeza resopla y gime de placer mientras yo vuelvo a meterme entera su polla en mi boca sin ninguna dificultad (años y años de tragar pollas me avalan).

Saco la polla de Dieter, totalmente empapada de mi saliva, de mi boca y le pregunto:

"Want to fuck me?". El no responde con la voz, simplemente asiente con la cabeza.

Yo me hecho sobre la cama y agarrando mis piernas por las pantorrillas las elevo en el aire ofreciendo mi culo totalmente abierto y palpitante a Dieter, mientras los 23 centímetros de mi pollón duro como la piedra reposan sobre mi abdomen llegándome la punta del capullo hasta mis costillas.

Dieter camina hacia la mesa del ordenador, se quita totalmente los pantalones y tras coger un pequeño lubricante se lo unta en los dedos y se acerca hacia mí, tendido en la cama. Mary contempla la escena de pie, al lado de la cámara y en silencio.

Dieter me lubrica el ano con fuerza y rudeza. Siento el frio del lubricante humediciendo todo mi esfinter e introduciéndoseme en el ano con la presión de los dedos de Dieter.

Dieter me clava su polla de un movimiento certero. Entra sin dificultad. Antes de salir de casa de mi tio me lavé a fondo y mi ano está más que dilatado tras años y años de ser follado por otros tios.

El bombeo de la polla de Dieter dentro de mi culo es ágil y veloz. Dieter resopla y mueve su culo adelante y atras frenéticamente mientras bombea su verga dentro de mí. Se nota que quiere desahogarse y que el tiempo apremia. Busca correrse cuanto antes.

Yo noto las embestidas de la verga de Dieter dentro de mí. El hormigeo en la punta de mi capullo cuando el capullo de Dieter impacta contra mi próstata masajeándola.

Mi pollón vuelve a palpitar de deseo apoyado sobre mi barriga. Me lo agarro con una mano y luego añado la otra. Así, a dos manos, me pajeo mientras Dieter resopla y respida cada vez más aceleradamente, con los ojos cerrados, sudando y bombeando mi culo con fuerza. Mis manos se deslizan frenéticamente a lo largo de mi polla mientras Dieter empieza a gritar inundado por el placer de su corrida. Siento la humedad de su leche caliente extenderse dentro de mi ano mientras yo me corro con ese pajote frenético que me he hecho mientras Dieter me penetraba.

Dieter se aleja de mí mientras sigue profiriendo exclamaciones de placer y Mary aplaude entre risas. La chica que me he follado antes está al lado de Mary sonriendo también sin decir nada.

Dieter se pone los pantalones y sentado frente al ordenador me hace una señal. Yo me acerco totalmente desnudo y con mi pollón todavía duro por efecto de la viagra y me siento a su lado.

Es la primera vez que veía ese programa FINAL CUT, editor de video. La cámara está conectada al ordenador. Me muestra el vídeo que ha grabado. Un escalofrio me recorre el cuerpo. Estoy viendo el primer video porno en el que el protagonista soy yo.

Dieter me muestra como con el cursor del ratón va marcando mi cara y difuminándola para que no se vea y no se me pueda reconocer.

A continuación firmo un papel donde autorizo el uso del material grabado en esa mañana. Mary explica que lo van a remitir a Berlín, donde tienen la central de la productora y que allí es donde evalúan a los casting y que se pondrán en contacto conmigo.

Efectivamente. Como dos semanas después de aquella mañana recibí un correo electrónico con una propuesta de contrato. Les respondí pidiéndoles más información y planteándoles dudas.

La respuesta la recibí unos días despues. Si firmaba con ellos tenía que residir en Barcelona pues es allí donde hacían los rodajes en España y además tendría que tener disponibilidad para viajar por Europa para rodajes fuera de España. Me decían que ellos se hacían cargo de los gastos de desplazamiento por Europa.

Pero yo por aquel entonces no podía residir en Barcelona. Con 18 años recién cumplidos estaba acabando el instituto y ya tenía previsto estudiar en la universidad. Así que les respondí que no me interesaba.

Como una semana después recibí una llamada de número desconocido en mi teléfono movil. Era un agente de la productora. Un hombre, con acento que parecía frances que me llamaba para insistir en que firmase el contrato con ellos.

"Puedes ser una estrella en esto chico, del nivel de Nacho o de Rocco" "Lo tienes más grande que ellos, piénsatelo bien chico" insistía él.

Yo, para quitármelo de encima le dije que sí, que me lo pensaría y le llamaría.

Pero tenía claro que en ese momento de mi vida no podía permitirme trasladarme a Barcelona y ni siquiera me atrevía a plantearles tal cosa a mis padres. Así que finalmente no devolví la llamada.

Pero me alegro de haber hecho ese casting. Así he visto desde dentro como funciona la industria del porno y, bueno, he sabido que tenía lo que hay que tener para ser actor porno.